Transcurridas 42 horas de regata continúa muy pareja la puja por los primeros lugares y en la flota se van diferenciando ya pelotones de barcos de performances similares, más allá de diferencias de diseño.
Ha habido algún inconveniente en el Fortuna III, se lo vio rumbo al SW a muy poca velocidad, luego retomar rumbo a Río pero con velocidad bastante por debajo de su potencial. No he podido obtener información de a bordo, si la consigo la haré saber inmediatamente.
La noche transcurrió con vientos de aleta al principio con ráfagas cercanas a los 20 nudos que permitieron grandes barrenadas en olas de 2 metros. El América del Sur, por ejemplo, tuvo picos de velocidad por encima de los 14 nudos.
El Fuga se ha mantenido más cerca de la costa, a unas 35 millas, mientras que los demás de punta están a casi 60 millas de la costa. Entre los de afuera las distancias son de entre 6 y 10 millas, suficiente como para no tener contacto visual, pero todos están pendientes de los posicionadores, siempre y cuando usen sus sistemas Iridium o equivales para tener señal.
Esta regata consta de varias instancias, cada una de las cuales es otra regata en sí misma.
La primera fue Buenos Aires – Punta del Este. Por obra de la meteorología esta vez fue de velocidad pura, regata técnica, de llevada del barco, elección acertada de velas y trimado, con casi nada de maniobras más allá de algún peeling para cambiar de paño o en algún caso tomar rizos.
Luego Punta del Este – Río Grande, terminando en estos momentos, que fue mucho más táctica. Todos buscaron posicionarse en función de los rivales, dejando de lado la estrategia para Río para más adelante. Nuevamente la meteorología favorable fue la causante. Con pronósticos de vientos francos por 24 horas futuras todos se enfocaron más en los contrincantes que en la cancha.
De cumplirse los pronósticos (aunque hay distintas versiones según la fuente) ya convendría internarse mar adentro, tal vez un poco, no mucho ni tanto como en ediciones anteriores.
Se vislumbra que para que cuando los primeros estén cerca de Río se va a generar una de las típicas zonas de calma muy habituales allí. Por tal motivo puede ser conveniente “pasarse” y llegar desde el Este, con algo más de viento y más franco.
Para poder anticiparse y tener margen de maniobra es conveniente alejarse de la costa. Hasta hora el Fuga viene apostando a lo contrario y le viene dando resultado. Hoy ya debería ser un momento de cambio a algo más estratégico.