El espectáculo reunió a cientos de curiosos. No es el primero que se hunde en Turquía. Para qué lo hacen y los riesgos naturales
Las autoridades turcas creen que el hundimiento de este Airbus A300 formará un arrecife de corales artificial que atraerá a buceadores de todo el mundo
Fue diseñado para volar a 30 mil pies de altura, pero descansará para siempre a 30 metros de profundidad en el Mar Egeo, donde será el corazón de un arrecife artificial. Y fue ese camino hacia el descanso lo que reunió a cientos de curiosos. La ceremonia resultó ser más visitada de lo esperado.
El Airbus de 36 años concluyó su viaje final el pasado sábado. Antes de que llegara a Kusadasi, las partes aún operativas de la aeronave fueron desmanteladas. El resto del avión fue trasladado hasta su último destino en camiones.
El hundimiento del Airbus A300 reunió a cientos de turistas a su alrededor
Ahora, formará parte de un arrecife artificial. No es la primera vez que se utiliza una aeronave para este tipo de experiencias, pero sí una de semejante tamaño. Özlem Çerçioğlu, el mayor de la provincia turca de Aydin, señaló a la agencia de noticias AFP que el objetivo es convertir a Kusadasi en un destino turístico para los buceadores y de protección de la vida submarina.
El turismo turco vive momentos de extrema gravedad por la cantidad de ataques terroristas que tuvieron lugar en Estambul y otros destinos históricos de ese país. Las autoridades ya han hundido otros tres aviones para formar este tipo de fenómenos artificiales. Sin embargo, el Airbus A300 del pasado sábado fue el mayor en su tamaño.
La ceremonia de hundimiento demoró dos horas
La ceremonia de hundimiento demoró dos horas
Los arrecifes artificiales no constituyen una experiencia nueva. Tampoco su aceptación es unánime entre los expertos en fauna marina. Mientras algunos aseguran que permite la reproducción de especies, otros alegan que las mayores poblaciones de peces no se deben a su multiplicación, sino a la reubicación y el traslado de cardúmenes a nuevos espacios en los que permanecer.
Çerçioğlu es optimista respecto al éxito que podría tener su Airbus en el fondo del mar. Cree que la biodiversidad aumentará y que los turistas se verán atraídos por las novedades marinas: “Esperamos que cada año 250 mil turistas domésticos y extranjeros vengan a bucear aquí”.