La Rolex Giraglia tendrá motivos más que sobrados de celebración durante la disputa de su 66ª edición, a mediados del próximo mes de  junio. Por un lado, este año se cumple el 20 aniversario de Rolex como patrocinador principal de la Giraglia y por otro, se cumple el 60 aniversario de la privilegiada relación de ROLEX con el deporte de la vela.

La Rolex Giraglia se compone de tres eventos diferentes aunque relacionados entre sí lo que proporciona a los regatistas diferentes desafíos y experiencias. Una parte importante se centra en Saint-Tropez, el hogar por excelencia del evento, tras las regatas de arribada que partirán el 8 de junio desde Sanremo (Italia) y, por vez primera, desde Barcelona. Del 10 al 12 de junio, los competidores participarán en tres días de regatas costeras frente a Saint-Tropez, a lo largo de la Riviera Francesa y, en tierra, disfrutan de la atmósfera del Vieux Port de la ciudad. Las series de regatas costeras estimula la sana competencia y sirve como calentamiento para el evento central de la semana, la histórica regata de 246 millas náuticas (446 km) desde Saint-Tropez hasta la sede del Yacht Club Italiano en Génova vía La Giraglia, un islote rocoso en el extremo norte de Córcega y que presta su nombre a esta famosa regata. La amenaza del Mistral en esta época del año significa que las condiciones serán un verdadero test tanto para las tripulaciones como para los organizadores.

La Rolex Giraglia atrae, año a año, a una potente flota de más 250 barcos, situándose así como uno de los eventos náuticos más importante dentro del calendario internacional de regatas. El record de inscripciones se estableció en 2016 con 268 barcos.

La regata oceánica, celebrada por primera vez en 1953, puede ser ferozmente rápida o, por el contrario, una exigente prueba táctica bajo vientos muy suaves. Cualquiera de los dos escenarios requiere determinación y perseverancia para tener éxito. El récord de la regata se estableció en 2012, cuando el Esimit Europa 2 finalizó la regata en menos de 15 horas. El ganador del año pasado fue el Momo, invirtiendo poco menos de 33 horas, lo que demuestra el contraste de las distintas condiciones que se pueden experimentar.

Momo regresa en este 2018 para defender su título frente a la fuerte competencia de sus rivales, los Maxi de 72 pies, Cannonball, de Caol Ila R (subcampeón en 2017), Jethou y Lucky. Cabe destacar que la regata de este año marca el regreso del Magic Carpet Cubed, el Wallycento de Sir Lindsay Owen-Jones, ganador en tiempo real en el 2016 y ganador de la clasificación general en el 2015.

La flota de Wally está especialmente bien representada, con la presencia de dos Wallycentos más que hacen su debut en este majestuoso concurso: el Tango, un impactante diseño de Mark Mills botado en el 2017, y el Galateia, diseñado por Reichel-Pugh, botado a finales de 2015 y ganador de la clase Wally en la Maxi Yacht Rolex Cup 2017. El cuarto barco en discordia es el 100 pies (30.5 metros), Leopard 3, ganador de la Rolex Fastnet Race y que va muy bien en condiciones duras, añade una dinámica diferente al grupo de los favoritos.

Los barcos más rápidos pueden proporcionar gran parte del glamour, pero la Rolex Giraglia es mucho más que esloras y que cazadores de récords. La regata se fundó con el espíritu Corinthian (regatistas no profesionales) en su corazón, como un medio para reunir a las comunidades de la vela francesa e italiana. Ahora, con un atractivo mucho más global, esta esencia sigue siendo fundamental y los organizadores, el Yacht Club Italiano y la Société Nautique de Saint-Tropez, la siguen adoptando. Para la mayoría de los equipos, esta es la regata de la temporada y alrededor de ella giran sus calendarios y sus compromisos. Todos se atreven a soñar con el éxito, con triunfar en tiempo compensado y con reclamar el emblemático reloj Rolex y el Rolex Challenge Trophy como ganador absoluto de la regata.

Durante los 20 años que lleva Rolex prestando su nombre a la regata como patrocinador principal, una gran cantidad de barcos han saboreado la victoria. Los participantes, que representan ocho países y con esloras comprendidas entre los 33 pies (10 metros) y los 100 pies (30.5 metros) han escrito sus nombres en la historia del evento. Imponerse a una flota de 250 barcos es un desafío significativo, que requiere esas cualidades que han unido a Rolex con la vela durante los últimos 60 años: determinación inquebrantable, preparación impecable, habilidad excepcional y una pasión inquebrantable por el deporte.

El socio por excelencia.

Rolex siempre ha buscado asociarse con actividades motivadas por la pasión, la excelencia, la precisión y el espíritu de equipo. Rolex naturalmente pivotó hacia el mundo la navegación de élite, creando una alianza que data de fines de la década de 1950. Hoy, Rolex es el patrocinador principal de 15 importantes regatas internacionales; desde las principales competiciones oceánicas como la Rolex Sydney Hobart Yacht Race, la Rolex Middle Sea Race y la bienal Rolex Fastnet Race, hasta la competición de mayor nivel del como el Rolex TP52 World Championship y las espectaculares Maxi Yacht Rolex Cup y la Rolex Swan Cup. Las relaciones tan íntimas del relojero suizo con los clubes náuticos más prestigiosos del mundo, incluyendo el Cruising Yacht Club de Australia, el Yacht Club Italiano, el Yacht Club Costa Smeralda (Italia), el Yacht Club de Nueva York (Estados Unidos) y el Royal Yacht Squadron (Cowes, Reino Unido) son la base de la relación duradera de Rolex con el top de este deporte espectacular.

A cerca de ROLEX.

Rolex, fabricante de relojes suizos con sede en Ginebra, es conocido en todo el mundo por su experiencia y por la calidad de sus productos. Sus relojes Oyster y Cellini, todos ellos certificados como Cronómetros Superlativos por su precisión, rendimiento y fiabilidad, son símbolos de excelencia, elegancia y prestigio. Fundada por Hans Wilsdorf en 1905, la marca fue pionera en el desarrollo del reloj de pulsera y fue el origen de numerosas innovaciones relojeras importantes, como el Oyster, el primer reloj de pulsera resistente al agua, lanzado en 1926, o el rotor automático Perpetual, inventado en 1931. A lo largo de su historia, Rolex ha registrado más de 400 patentes. Rolex, como empresa de fabricación verdaderamente integrada e independiente, diseña, desarrolla y produce ella misma todos los componentes esenciales de sus relojes, desde la fundición de aleaciones de oro hasta el mecanizado, la fabricación, el montaje y el acabado, la caja, esfera y la pulsera. A través de programas filantrópicos y una amplia gama de actividades de patrocinio, Rolex también participa activamente en el apoyo a las artes, los deportes y la exploración, y alienta el espíritu empresarial, así como la conservación de los recursos naturales.