Quién es quién a bordo del monotipo de la Volvo Ocean Race?
En la elección correcta de los tripulantes radica un porcentaje muy importante de la victoria final.
Vamos intentar responder a la pregunta… Cada tripulante tiene su responsabilidad y su cometido a bordo para sacar el máximo rendimiento del barco durante las 24 horas del día y navegar más rápido que sus rivales con el único fin de ganar la regata…
Antes de definir los puestos a ocupar por cada uno de los tripulantes hay que tener claro que el objetivo fundamental del CEO del equipo es reunir a la mejor tripulación, y esto supone escoger a los navegantes más y mejor cualificados para cubrir cada uno de los diferentes puestos. Sabiendo esto, es lógico pensar que es una cuestión fundamental la de conocer todos los trabajos y acciones a desarrollar cada ‘puesto de trabajo’ a bordo. ¿Y cómo se eligen a los tripulantes de entre los cientos de regatistas cualificados que se pueden presentar a este ‘casting’? En la mayoría de las ocasiones, la experiencia en regatas del mismo tipo, millas navegadas y duración hace de un tripulante el candidato idóneo para uno u otro puesto; sin embargo, en otras ocasiones, es el entusiasmo y el deseo de participar lo que se tiene en cuenta cuando se trata de subir a bordo a navegantes con menos currículo y con poca experiencia.
Se puede decir que aquello de “uno para todos y todos para uno” se cumple al 100% a bordo de todos los barcos de regatas, y de manera muy especial a bordo de los monotipos VO65 de la Volvo Ocean Race, donde las tripulaciones han de convivir juntos durante nueve meses. Por eso, uno de los principales factores para alcanzar el éxito es que la tripulación debe funcionar como un conjunto, como un “uno para todos y todos para uno”, con una dedicación y un compromiso presente las 24 horas del día, siete días de la semana, 30 días al mes a lo largo de los 9 meses que dura la regata.
Una vez aclarados estos aspectos previos, vamos a ver una a una las principales funciones y responsabilidades de cada puesto a bordo de un VO65 en la vuelta al mundo a vela
Patron
Es ‘il Capo’ y su tarea es la más completa y la más compleja. Sobre sus hombros recae ni más ni menos que la máxima responsabilidad a bordo: es el entrenador del equipo, el capitán y, en ocasiones, el director general, todo en uno. En el agua, el patrón suele tener la última palabra en cuanto a la táctica y la estrategia se refiere, aunque trabaja codo con codo con el navegante. En general, quien ocupa este puesto suele ser un consumado regatista: entre ellos abundan los medallistas olímpicos y campeones mundiales, y la mayoría han sido y son magníficos timoneles o cañas. Las principales características de un buen patrón son las mantener el tipo en los momentos de tensión, y su capacidad para motivar y dirigir, además de tener una paciencia inagotable. Cuando están en tierra, muchos patrones incluso tienen responsabilidades empresariales, ayudan a obtener beneficios para los patrocinadores de su equipo y a ajustarse a los presupuestos, e incluso realizan funciones de director de personal. Además, exploran en todo momento cómo optimizar las prestaciones de su barco.
Navegante:
La responsabilidad del navegante es fundamentalmente la de asegurarse de que el barco se encuentre siempre en la mejor posición para sacar el máximo partido a los vientos y las corrientes, y llegar de un punto a otro lo más rápido posible. El navegante tiene a su alcance un arsenal de aparatos y programas informáticos cada vez más avanzados. Sin embargo, a medida que se perfeccionan los medios de los que disponen, también aumenta la presión a la que están sujetos. Un aspecto clave de s trabajo es la recopilación de datos sobre el rendimiento, así como su análisis y procesamiento. La mayoría de los navegantes son especializados meteorólogos que disfrutan devorando números para establecer los índices de riesgo de cada maniobra.
Jefe de guardia:
El jefe de guardia es el responsable de todo lo que sucede a bordo durante su ‘guardia’, desde la velocidad del barco hasta la supervisión de los cambios de vela para que éstos sean perfectos, pasando por todas las maniobras. Se distribuyen por parejas y trabajan en equipos siguiendo exactamente los mismos protocolos. Su tarea consiste en lograr que, en el transcurso de cada guardia (que suelen ser de cuatro horas), el rendimiento del barco sea el óptimo en todo momento. Se asegura, así mismo, de que los regatistas ocupen las posiciones que mejor se adaptan a sus características, de manera que cada tripulante esté haciendo el trabajo correcto en el momento adecuado. Saben anticiparse a los acontecimientos, motivar al equipo, y generalmente son especialistas en, al menos, una de las posiciones a bordo.
Caña:
Los mejores timoneles de la Volvo Ocean Race están muy solicitados, y se puede decir que tienen, casi, un sexto sentido para dirigir el barco, sean cuales sean las condiciones, hacia un rumbo determinado durante periodos prolongados. Habitualmente al menos cuatro o cinco de los miembros de la tripulación, incluido el patrón, suelen ser consumados timoneles. Aun así, el tripulante nombrado caña y trimmer se hace cargo del timón entre un 70 y un 90 por ciento del tiempo de su guardia, por lo que pasa varias horas en ese puesto.
Piano:
El piano controla las drizas y cabos de control, y es el catalizador de todas las maniobras. Se encarga, además, de coordinar a los hombres que trabajan en la popa del barco con aquellos que se mueven en proa. El jefe de guardia da la orden de cambiar las velas o realizar una maniobra determinada, pero es el piano quien organiza hasta el último detalle. Se encarga de soltar e izar las diferentes drizas o cabos de control con una sincronización perfecta durante la secuencia. En resumen, es el coreógrafo de la maniobra, y quien coordina a los tripulantes mientras se realiza.
Capitán del barco:
Es el McGiver de a bordo… Su principal responsabilidad es la de asegurarse de que esté en óptimas condiciones de navegación durante toda la regata. En el mar, eso significa encargarse de que todas las revisiones rutinarias y de que las reparaciones de cualquier tipo se lleven a cabo con efectividad y eficacia, para que la máquina siga rindiendo al 100%. Para ocupar este puesto se necesita un abanico muy amplio de aptitudes, y con frecuencia son ingenieros o tienen experiencia en astilleros. El capitán del barco conoce la embarcación hasta el último detalle, a fin de estar preparado para cualquier clase de reparación que sea necesario llevar a cabo. Colabora estrechamente con el jefe del equipo de tierra.
Trimmer:
Los trimmers colocan y ajustan las velas en función de las condiciones del viento, y deciden qué configuración conviene más en cada momento. Las velas (mayor, foques, gennaker/spinnake, etc.) ejercen de motor del barco, y aunque es relativamente fácil conseguir que un Volvo Ocean 65 navegue a buen ritmo, lo complicado es encontrar esa punta de velocidad extra en la que radica la diferencia entre un primer y un segundo puesto.
Proa:
El proa es el responsable de casi todo lo que ocurre del mástil en adelante, un puesto donde se vive toda la acción en primerísima línea. Sus virtudes más importantes son la fiabilidad a toda prueba, velocidad, destreza, sangre fría, y buenas dosis de fuerza y agilidad. En muchos aspectos, el proa es una ‘especie’ aparte. Los cambios y las maniobras dependen en gran medida de sus aptitudes personales en circunstancias de muchísima presión. Además, suele realizar sus tareas en solitario en el puesto más peligroso, desprotegido, húmedo y frío de todo el barco.
Reportero
La figura del reportero a bordo (OBR) se introdujo por primera vez en 2008-09 como parte de la tripulación. Los reporteros a bordo disfrutan de un lugar privilegiado para captar todas las situaciones que viven los equipos en competición, desde las condiciones de navegación extremas del océano Antártico hasta la zona de calmas ecuatoriales. Realizan una labor de documentación desde los barcos y envían noticias en vídeo HD, audio, fotografías o mensajes escritos a todo el mundo durante 24 horas. Lo único que no pueden hacer, bajo ninguna circunstancia, es participar en la navegación.
Si el 80% del éxito se consigue antes de iniciar una regata, en esta elección y definición de tareas a bordo está, no ese 80%, pero sí un porcentaje importante del éxito de la campaña. Así que después de conocer un poco más ¿quién va a hacer qué?, solo resta que el patrón de la orden de subir a bordo, ocupar sus puestos, soltar amarras y zarpar hacia la aventura a bordo de los Formula 1 del mar .