Tras el merecido día de reserva del jueves, la final de la Louis Vuitton Cup vuelve a la acción con dos regatas programadas para hoy, con un marcador de 6-4 a favor del INEOS Britannia.
Esta serie de pruebas a siete puntos ha demostrado ser un clásico y una de las finales más igualadas de la larga historia de la Louis Vuitton Cup, que se remonta a la primera edición de 1983. Por aquel entonces, fue el Challenger “Australia II” el que ganó la America’s Cup, poniendo fin a 132 años de dominio del New York Yacht Club: la racha de victorias más larga de la historia del deporte.
El Challenger que gane esta serie, ya sea INEOS Britannia o Luna Rossa Prada Pirelli, espera hacer lo mismo cuando se enfrente al actual Defender, Emirates Team New Zealand, en el Louis Vuitton 37ª America’s Cup Match, que comienza el 12 de octubre.
La jornada de hoy podría resultar complicada, ya que sobre Barcelona ha descendido una corriente de aire más frío que esta mañana produce viento de componente noroeste. A mediodía se espera que se evapore, antes de que empiece a aumentar lentamente desde el sur. A medida que avance la tarde, la estabilidad y la fuerza del viento serán motivo de debate. El director de regata, Iain Murray, espera que aumente a 6-9 nudos del sureste (xaloc), mientras que otros modelos sugieren que el aire más frío alrededor de Barcelona podría impedir que entre el viento térmico del sur.
Como dice la famosa frase: «Para ganar la America’s Cup, primero hay que ganar la Louis Vuitton Cup», y para los dos fantásticos equipos de la final de la Louis Vuitton Cup, el escenario es sencillo. INEOS Britannia debe ganar una regata de tres posibles y la Louis Vuitton Cup será suya. Luna Rossa Prada Pirelli, debe ganarlas las tres.
En la Louis Vuitton Cup, nada es imposible. Esperen lo inesperado
