Copa del Rey Panerai
El cutter bermudiano Hallowe’en (1926) se colocó hoy al frente de la clase Big Boats (barcos de más de 23 metros) tras la disputa de la primera jornada de la XIV Copa del Rey Panerai de barcos de época que, desde hoy y hasta el sábado, reúne una flota de 60 embarcaciones históricas de 12 países en el Club Marítimo de Mahón.
La embarción armada y patroneada por Inigo Strez, que navega en representación del Royal Irish Yacht Club (RIYC), se impuso tras una emocionante llegada en puerto que pudo contemplarse desde el paseo marítimo de la capital menorquina.
«Olympian» (1913), «Cippino» (1949), «Argos» (1964) y «Lohengrin» (1974) lideran la regata de barcos de época del Club Marítimo de Mahón tras la primera jornada
El Hallowe’en, barco que mantuvo el récord de la Fastnet desde el año de su botadura hasta 1939, aventajó en apenas 15 segundos en tiempo real al Moonbeam IV, el William Fife III de 1914 vencedor en las ediciones 2014 y 2015 de la Copa del Rey Panerai. La diferencia se incrementó hasta 01:34 minutos al compensar los tiempos. Aunque el Moonbeam es 11 años más antiguo y monta aparejo de cangreja, su mayor eslora (33 metros frente 25) le obliga a navegar alrededor de 15 segundos más rápido por cada milla recorrida. El Moonbeam III (1903) ocupa el tercer puesto provisional, después de ceder casi ocho minutos respecto a su hermano menor. Ambos fueron concebidos por el mismo diseñador.
“¡No siempre puedes ganar a los dos Moonbeam!”, declaró un emocionado Inigo Strez al llegar a puerto. “Hemos hecho una buena salida y hemos navegado por delante hasta que la brisa ha caído y la flota nos ha dado alcance. En ese momento hemos tomado una serie de decisiones tácticas que han sido acertadas y hemos conseguido llevarnos la victoria. Nos encanta navegar en Mahón, es una de las mejores regatas del circuito y esperamos volver a menudo. Es la primera vez que hemos hecho una llegada en puerto y es una sensación genial”.
El estreno de la Copa del Rey Panerai tuvo menos viento del esperado. El anuncio de 15 o más nudos no se cumplió y el Gregal (NE), que fue rolando a Tramuntana (N) en el transcurso de la jornada, no superó en ningún momento los 12 nudos de intensidad, llegando a soplar en algunos tramos por debajo de los 6.
La organización optó por montar un recorrido costero de 16,3 millas náuticas, con salida frente a la bocana del puerto natural de Mahón, desmarque, baliza a unas cinco millas al este de Punta Prima, Isla del Aire por estribor y llegada en el interior del puerto de Mahón. Chimo González-Devesa, presidente de la Federación Balear de Vela e integrante del Comité de Regatas, explicó que la prueba se desarrolló sin incidentes. “El viento ha ido refrescando a medida que avanzaba el día y ha rolado de los 80º iniciales a los 30º del final de la jornada”.
En la categoría de barcos anteriores a 1950 y con aparejo bermudiano (Epoca Marconi), el Cippino, del armador Daniel Sieleki, dejó claro que quiere repetir el triunfo obtenido en la Regata Illes Balears Clàssics del Club de Mar Mallorca, disputada hace 10 días. El velero argentino, un diseño de German Frers de 1949, invirtió 3 horas, 18 minutos y 32 segundos, lo que le dio una ventaja de algo menos de tres minutos sobre el Rowdy (1916), armado y patroneado por Brendan McCarty, que, no obstante, obtuvo el mejor registro en tiempo real, con 2 horas y 59 minutos. El yawl Comet (1946) es, de momento, el tercer mejor barco de esta clase con 12 participantes.
Martín Billoch, patrón del Cippino, explico: “Hemos hecho muy buena salida. Luego se ha encalmado y había mucha ola. El Rowdy y nosotros nos hemos separado bastante de la flota, tomando mucha ventaja. Al final, creíamos que habían ganado ellos, pero no ha sido así. Estamos muy contentos”.
Tres de los once barcos de la Copa del Rey Panerai con más de 100 años de vida copan los primeros puestos de la clase Época Marconi, que cuenta con 12 inscritos. El Olympian, un William Gardner de 1913, cuyo casco verde lo diferencia a simple vista del resto de la flota, fue el más rápido en completar la travesía costera (3:04:06) y consiguió superar en apenas 38 segundos al segundo clasificado una vez aplicadas las compensaciones, el italiano Linnet (1905), patroneado por Patrizio Bertelli. El Kelpie (1903) cierra este cuadro de honor de barcos centenarios.
El Argos (1964), de la armadora Bárbara Trilling, un diseño Holman, inició con buen pie su participación en la categoría de Clásicos (barcos de 1950 a 1975) y mostró con claridad que su objetivo es repetir el triunfo del año pasado. La competencia en esta categoría es muy dura, dado el gran nivel de la flota, formada por 20 embarcaciones.
Guía (1967), el Sparkman & Stephens de Jordi Costa, ocupa la segunda plaza provisional, seguido de un velero legendario, Il Moro di Venezia (1975), que hoy fue el más veloz de toda la flota de la Copa del Rey Panerai con una marca de 2 horas y 53 minutos.
“Estamos muy contentos con la regata de hoy. La verdad es que se nota que llevamos mucho tiempo navegando y que somos amigos, aunque eso no significa que no nos importe ganar. Nos gusta competir, pero tambien queremos disfrutar”, señaló Bárbara Trilling.
En Espíritu de Tradición, donde concursan embarcaciones construidas en fibra (RI Clásico) o que han sufrido alguna modificación, el Puma 34 Lohengrin (1974), de Paco Bacquelaine y Sergio García, se situó por delante del Calima (1970), de Javier Pujol, el barco que más veces ha ganado la Copa del Rey Panerai (10) y que este año deberá luchar hasta el último bordo para prolongar su leyenda. El Legolas (2003), de Jens Ricke, tercero en discordia, también debe ser tenido en cuenta en esta categoría.