Todos alguna vez en nuestra vida hemos oído hablar del esquí acuático, y sabemos más o menos de que va…alguien se pone unos esquís especiales y es arrastrado por un barco para darle velocidad para poder “esquiar” las olas. Pero…¿alguien ha oído hablar alguna vez del water ski “barefoot”?
El water ski “barefoot” es una modalidad de esquí acuático donde no se usan esquís, es decir, que se esquí sobre los propios pies. Al contrario de lo que estáis pensando, no es necesario tener una talla de pié excesivamente grande, únicamente es necesario que el barco vaya a más velocidad que la usada en esquí acuático normal.
Como todo deporte, el water ski “barefoot” también tiene su historia. Es originario de la ciudad de Winter Haven, en Florida. Surgió en el año 1947 cuando un chico de 17 años llamado A.G. Hancock, decidió probar a realizar esquí acuático sin esquís.
Existen tres modalidades distintas de competiciones de water ski “barefoot”, acrobacias, saltos, y slalom. En la modalidad de acrobacias, el esquiador tiene 15 segundos para realizar el mayor número posible de acrobacias. En slalom, el deportista tiene 15 segundos para pasar por el mayor número de puertas posibles. En la modalidad de saltos, los esquiadores tienen la oportunidad de realizar tres saltos, de los cuales sólo contará el mejor.
Este verano ha tenido lugar en The Blue Moo, Winsconsin, el mundial de water ski “barefoot”, en el que durante una semana se han disputado todas las pruebas de salto, acrobacias, y slalom.
El próximo mundial tendrá lugar en agosto del próximo año 2018 en el lago Dream, en Ontario, Canadá.
