Cumplida poco más de la mitad del recorrido, la 42ª Regata del Río Negro no arroja novedades en el frente donde los hermanos Franco y Dardo Balboa dieron un paso más hacia la conquista de la travesía, al quedarse ayer con la cuarta etapa. La prueba, desde que comenzó el sábado en la Isla Jordán de Cipolletti, es un monólogo del bote de Ceppron, que se muestra firme en cada palada e imbatible en el sprint final.
El tramo de ayer, de 43 kilómetros, se cumplió entre el Establecimiento Don Andrés y el balneario de General Conesa que también, como ocurrió en las etapas anteriores, fue una fiesta a la orilla del río a medida que iban arribando los palistas.
La novedad fue que el binomio ganador de la edición anterior, conformado por el esloveno Jost Zakrajsek y el español Federico Vega, terció con más decisión en la carrera. De hecho, lideró en buena parte de trayecto y encabezó la mayoría de las escapadas.
En el tramo final, se empleó a fondo y si bien no le alcanzó para derribar a los líderes, sí le sobró para superar por medio bote a los más ganadores de esta tradicional competencia, Néstor Pinta y Martín Mozzicafreddo, un dupla que empieza a sentir el peso de las años (ambos superen los 40 años), contra menos de 25 que promedia el bote puntero.
En esta ocasión, a diferencia de los parciales anteriores no hubo quejas de los palistas por roces o maniobras desleales. Además, todos arriesgaron pero no al límite, reservando energías para hoy, cuando se dispute la contrarreloj, donde cada bote peleará solo en el río ya que partirán separados.
El año pasado en esta etapa Zakrajek y Vega sacaron la diferencia que al cabo fue la que quebró la carrera a su favor.
Hasta ahora si bien los extranjeros nunca dominaron plenamente la competencia, van creciendo paso a paso. También los reyes del río (13 regatas en conjunto) demostraron que se manejan muy bien en la carrera contra el tiempo y saben que es en esta etapa en la que pueden ilusionarse y achicar el margen de poco más de 22 segundos que llevan los líderes que partirán de atrás, otra ventaja adicional para seguir marcando diferencias.